jueves, 17 de marzo de 2011

Fuga de cerebros, regreso de científicos de carne y hueso.

Uno de los problemas históricos de la construcción del sistema científico Argentino fue lo que se dio en llamar la 'Fuga de Cerebros'. O sea que científicos en los cuales el país invirtió muchos recursos económicos y humanos para formarlos deciden emigrar del país y radicarse en lugares donde las condiciones para trabajar en investigación son mejores que en el nuestro. Esta situación se profundizó debido a las crisis cíclicas que sufrió el país y que llegó a su punto cúlmine en Diciembre de 2001. La reversión de esta situación es una cuestión compleja en la que no se había logrado avances notables hasta muy recientemente.




Como una de las políticas implementadas por este gobierno y el anterior para recrear el sistema científico en el país (ver el articulo'Cambios y Permanencias en la Ciencia Argentina' en este Blog) se implementó el programa Raices, tanto para repatriar científicos argentinos que están en el exterior, como (y eso me parece un punto muy interesante) crear redes de colaboración entre científicos argentinos radicados en el país y sus pares del extranjero.

La nota siguiente de Matías Alinovi me parece un análisis sesudo de este tema que se presenta mucho más complejo de abordar de lo que parecería en una primer mirada:

CIENCIA: LA DIÁSPORA AL REVÉS. M. Alinovi

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